El diálogo

 Es importante a la hora de aprender a escribir un buen diálogo, leer varios textos que los tengan, el ver como plasma un escritor/a lo que dicen los personajes.

  

Demasiado diálogo sin mucha acción acabará haciendo que tu historia parezca un guion de radio. Normalmente se usan descripciones que se intercalan en los diálogos y, además, se muestran las acciones de los personajes al hablar. El lenguaje corporal también proporciona datos cruciales sobre los personajes. Ese lenguaje se puede usar para enfatizar o contradecir lo que el personaje está diciendo.

Intercala diálogos con las descripciones de lo que sucede para mantener el ritmo de la trama.

Christopher Edge

  

- ¿Es importante? – pregunta Denna haciendo un mohín -. Si tienes que irte…

Lórim sacude la cabeza, guarda el diario tan rápido como puede y se come la última patata mientras pregunta:

- ¿Cómo es que estudias en la cafetería?

- En la biblioteca no puedo pensar. Hay demasiado ruido. – Denna se limpia cuidadosamente los dedos con una servilleta y los hace tamborilear sobre la mesa -. Así, cuando lleguen los exámenes parciales estaré preparada. Ya sabes.

- Ah, pero ¿para los parciales hay que estudiar?

- También puedes suspender. – Las facciones de Denna, suaves y delicadas, se dotan de una pizca de picardía.

Costa Alcalá

La segunda revolución. Heredero

 

 

  

Cuando se escribe un diálogo, este se marca con guiones largos, que también se usan para señalar las acotaciones. Cuando quieras mostrar una duda o que alguien vacila un poco mientras habla, usa los puntos suspensivos, que también puedes emplear al final de una línea para indicar una interrupción.

 

- No puedo… - tartamudeó. Todo cambia cuando tu padre muere.

Mark había cambiado. Era como un desconocido. No sabía qué hacer ni qué decirle.

Sara Crowe

Bone Jack

 

- ¿Qué haces aquí? – Tenía un acento extranjero y pronunciaba las ces como eses.

- Yo… nada – apenas pude pronunciar.

- ¿Con quíen estás?

- Con nadie, de verdad.

Sam Hepburn

Chasing the dark

 

 

Los lectores deben saber perfectamente qué personaje habla cuando leen un diálogo, mediante una información sencilla de proporcionar usando un pronombre o el nombre del personaje con un verbo como “decir”, “preguntar” o “responder”.

Se pueden usar verbos, adverbios y expresiones más específicas para dar datos sobre la forma en que habla, aunque en este caso estamos contando más de lo que mostramos.

- Estoy bien – respondió ella con tristeza.

Evítalos y opta por comunicar esta información a través de las acciones o del diálogo del personaje.

- Estoy bien – respondió ella, enjugándose una lágrima.

 

Demasiado diálogo sin mucha acción acabará haciendo que tu historia parezca un guion de radio. Normalmente se usan descripciones que se intercalan en los diálogos y, además, muestran las acciones de los personajes al hablar. El lenguaje corporal también proporciona datos cruciales sobre los protagonistas.