En El libro de homenajes, del poeta Jesús Aguado, el autor escribe unos homenajes muy originales, donde indica qué se llevarían las personas a una isla desierta. Como éstos, por ejemplo:
«Josele se llevaría un arco de triunfo hecho de
chocolate»; «Reme se llevaría una campana de bronce grande como la de una
catedral»; «Chantal se llevaría un detector de mentiras»; «Juan se llevaría la
palabra isla»
Una vez leídos estos ejemplos u otros que inventemos, los alumnos
piensan qué les gustaría llevarse a una isla desierta o qué creen que se
llevarían algunos de sus amigos o familiares a una isla desierta.
Pueden escribir el texto en primera o en tercera persona, les pedimos
que cuenten qué harían con eso que se llevarían, a qué isla, qué habría allí,
qué les pasaría... ¡A escribir!