Miss Caroline

 

Miss Caroline no pasaba de los veintiún años. Tenía el cabello pardo-rojizo brillante, las mejillas rosadas y se pintaba con esmalte carmesí las uñas. Llevaba también zapatos de tacón alto y un vestido a rayas encarnadas y blancas. Tenía el aspecto y el perfume de una gota de menta. Se alojaba al otro lado de la calle, una puerta más abajo que nosotros, en el cuarto delantero del piso superior de miss Maudie Atkinson. Cuando miss Maudie nos la presentó, Jem vivió en la luna durante días.

Miss Caroline escribió su nombre en la pizarra y dijo:

—Esto dice que soy miss Caroline Fisher. Soy del norte de Alabama, del condado de Winston.

Harper Lee (Matar un ruiseñor)